HISTORIA DEL SATANISMO Y LA BRUJERÍA, por JULES MICHELET

  

HISTORIA DEL SATANISMO Y LA BRUJERÍA, por JULES MICHELET

Jules Michelet fue un destacado historiador francés del siglo XIX, nacido el 21 de agosto de 1798 en París y fallecido el 9 de febrero de 1874. Es conocido por sus obras históricas que abordaban la vida cotidiana y las mentalidades de las épocas pasadas, con un enfoque humanista y romántico. Michelet fue profesor en el Collège de France, donde impartió clases de historia y filosofía, y también se desempeñó como director de los Archivos Nacionales de Francia. Su obra más famosa es "La Historia de Francia", pero también escribió sobre temas variados como la religión, la naturaleza y el ocultismo.

"Historia del Satanismo y la Brujería" (originalmente titulada en francés como "La Sorcière") es una obra publicada en 1862 que investiga la persecución de las brujas durante la Edad Media y el Renacimiento. Michelet, con un estilo que varía entre lo irónico, lo tierno y lo insobornable, presenta la brujería no como una simple superstición o culto al diablo, sino como una forma de resistencia popular y un fenómeno social contra la opresión eclesiástica y feudal de la época.

Este libro es un himno al espíritu humano que busca liberarse de los grilletes del dogma y la tiranía. Michelet argumenta que las brujas eran, en muchos casos, mujeres que practicaban una forma de medicina natural y que su persecución era más una caza contra el conocimiento ancestral y la libertad de las mujeres que una lucha contra la herejía. Analiza cómo la Iglesia manipuló la figura de Satanás para justificar la eliminación de estas mujeres que, en su visión, representaban una amenaza al orden establecido.

Michelet describe detalladamente los rituales y creencias asociadas con la brujería, desde los pactos con el diablo hasta las misas negras y los aquelarres. Su análisis incluye la psicología de la época, donde la alucinación y el miedo eran utilizados para controlar a las masas. También ofrece un estudio sobre cómo la brujería, en su esencia, era una continuación de prácticas paganas que buscaban el bienestar y la sanación, en contraste con la visión demoníaca impuesta por la Iglesia.

El libro de Michelet es pionero en su intento de desmitificar la brujería, presentándola como una manifestación de la resistencia humana y un reflejo de las condiciones sociales de la época. Su obra ha sido influyente en la historiografía de la brujería, aunque también ha sido criticada por su falta de rigor académico y su enfoque romántico en algunos aspectos. Sin embargo, "Historia del Satanismo y la Brujería" sigue siendo una referencia importante para entender cómo la brujería fue interpretada y perseguida en la historia europea.